Empiezo por los patos, unos de los protagonistas de esta estación sin duda.
Porrón moñudo (Aythya fuligula), macho.
En el Parque Regional del Sureste se pueden ver porrones moñudos y europeos, ánades azulones y frisos, cercetas y cucharas principalmente. Y, aunque no son patos propiamente, también somormujos lavancos y zampullines chicos y cuellinegros.
Porrón moñudo.
Cerceta común (Anas crecca), macho con plumaje a medio camino entre eclipse y verano.
Zampullín chico (Tachybaptus ruficollis) en plumaje de invierno.
Sin embargo, además de las especies más habituales, siempre se registran observaciones de otras menos habituales o incluso de autenticas rarezas. Hace tres años localizamos un macho de porrón osculado por ejemplo. Y este año, la estrella del lugar ha sido una hembra de porrón acollarado.
Porrón acollarado (Aythya collaris), hembra.
Este pato, que vive en Ámerica del Norte, es un divagante raro en Europa y rarísimo en la Peninsula Ibérica. En el caso de esta hembra se ha tirado más de un mes en un tramo poco accesible del rio Jarama junto a un grupo de porrones moñudos.
Otra rareza, aunque cada vez menos en Madrid, es el tarro canelo. En algunos embalses cercanos a la sierra es cada vez más habitual verlos. Puede ser una población resultante de escapes que hayan llegado a criar en libertad, o tal vez invernantes genuinos. No lo se. Lo que está claro es que están sin anillar, cada vez se les ve en mayor número y su comportamiento es genuinamente salvaje.
Tarro canelo (Tadorna ferruginea)
Tarro canelo en vuelo.
Y para terminar con los patos os dejo una especie autoctona en grave peligro de extinción que no había podido observar hasta este invierno: la malvasía cabeciblanca.
Malvasía cabeciblanca (Oxyura leucocephala)
El ejemplar de la foto probablemente sea un joven, aunque es muy dificil distinguirlos de las hembras, pero por lo confiado que se mostraba bucenado muy cerca de la orilla sin asustarse por nuestra presencia supongo que no es adulto. Los machos azules tienen un llamativo pico de color azul, y aunque ese día vi más de 30 ejemplares en la misma laguna, no pude acercarme mucho a ellos.
Malvasía cabeciblanca, joven.
Malvasía cabeciblanca, macho adulto.
El lugar de estas observaciones es Daimiel (Ciudad Real), pero no en Las Tablas, que este año estaban muy flojas de aves, sino en una laguna que hay a las afueras del pueblo. Resulta tremendamente sorprendente la ebullición de vida que se puede ver en este lugar para mi desconocido hasta ahora, que no cuenta con ningún tipo de protección, y que contrastaba con unas cercanas Tablas de Daimiel muy apagadas este año. Además de las más de 30 malvasías, vimos varios cientos de patos de todo tipo incluyendo tarros blancos o porrones pardos. También un nutrido grupo de ánsares comunes, otro de flamencos, cientos de fochas y gallinetas (que se encontraban en su mayoria fuera de la láguna, picoteando el suelo en tierra firme) y, lo que más nos llamó la atención, un gran número de calamones. Dando una vuelta a la laguna contamos 10 ejemplares distintos y teniendo en cuenta los hábitos de este bicho, seguro que había muchos más escondidos entre el carrizo. En fín, os dejo unas cuantas fotos de esta laguna tan sorprendente.
Calamón (Porphyrio porphyrio)
Ansares comunes (Anser anser)
Flamenco común (Phoenicopterus roseus)
A parte de Daimiel, este invierno también he visitado el Embalse de Arrocampo en Cáceres. La pena es que hubo una espesa niebla durante todo el día que dificultó mucho las observaciones y las fotos. Aún así disfruté muchisimo, lo que habla muy bien del lugar. Pude ver por primera vez en mi vida avetoro (nuestra garza más escasa y huidiza), además de garza, real, garcetas grande y común, garcilla bueyera, cormoranes, calamones, avefrías, escribano palustre, pechiazul, aguiluchos laguneros, esmerejón, elanio...
La pena, como os digo, la niebla y las fotos. Las únicas que merece la pena enseñar son las de esta pareja de nutrias, especie que no tengo oportunidad de ver todos los días, con las que me deleité durante más de una hora mientras nadaban juntas, compartian sus capturas, se escondían entre el carrizo y volvian a salir para nadar juntas de nuevo. Cosas del celo supongo.
Pareja de nutrias (Lutra lutra)
Nutrias en la niebla.
Con esto termino por hoy. Pronto la segunda parte.
Un saludo.
Preciosas fotos Ángel, me encanta la de las nutrias en la niebla. Un saludo.
ResponderEliminarOye Angel ¿que puñetas haces saliendo tan poco? no será por timidez digo yo porque las fotos que traes algunas son maravillosas. La de las Nutrias en la niebla es una maravilla, habría que ampliarla,etc, es una joya.
ResponderEliminarLa de las Malvasías, las del Tarro Canelo, ¿que más quieres hombre? afloja información y déjate de ausencias.
Bravo por el calamonazo.
Las nutrias parecen salir del mismo tocon de madera, foton!
ResponderEliminarUna buena serie de observaciones ( las nutrias y el calamon uffffff) y como "pero" tendriais que luchar pra que ese humedal que careze de proteccion se le porteja a tenor de lo que hay alli!
Habra que hacer mas entradas.......
Saludos camperos!
Hola Ángel, yo también te felicito por la de las nutrias en la niebla. Has dejado lo mejor para el final, sin desmerecer a todo lo anterior. Es una foto maravillosa. Lo mejor es que todavía tienes material para una segunda parte. Saludos.
ResponderEliminarBuena vuelta me has echo dar sin salir de casa, saludos Ángel ,
ResponderEliminarMuchas gracias a todos, la verdad es que la foto de las nutrias ha quedado chula pero me hubiese gustado disfrutar de la observación sin niebla y con mejor luz no os voy a engañar.
ResponderEliminarJesús, si actualizo poco no es por timidez sino por falta de tiempo.
Campero, el humedal está en Daimiel (Ciudad Real) y yo vivo en Madrid, no había estado alli nunca. Aunque con lo que vi alli imagino que habrá residentes en la zona que esten luchando por protegerlo.
Lo dicho, muchas gracias a todos.